Entonces, con el coco como nuestro principal protagonista y la asimetría que hace que cada producto sea único, nos propusimos crear una imagen que refleje estos valores. Queríamos que nuestra marca evocara la tierra con colores cálidos y naturales. Queríamos que se sintiera minimalista pero consciente, y que cada elemento del diseño transmitiera este mensaje.
Decidimos incluir el isotipo de un coco en nuestra tipografía irregular, un guiño a la esencia misma del producto sin caer en la simplicidad, logrando crear una marca que se siente orgánica y auténtica, al igual que cada uno de sus bowls.
Sobre nuestra colaboración, Ana Amaro fundadora de Cocolé nos comparte “Nos encantó el trabajo de Fer, el diseño fue exactamente lo que buscábamos muy dirigido hacia el concepto de la marca. Sin duda una gran colaboración”.
Hoy, Cocolé es más que un nombre o un producto, es una marca con una historia que contar. Actualmente sus productos se comercializan a través de e-commerce, llevando sus bowls únicos a hogares de todo México. Conoce toda su oferta en cocole.mx
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